La casa del HIDALGO
Está enclavada en la antigua parroquia de San Facundo y es un modelo de residencia nobiliaria del siglo XV. La Fachada (1), con esquina a la plazuela de San Facundo, nunca se revistió del típico esgrafiado lo que permite ver la construcción tradicional de mampostería y tapial entre cadenas de ladrillo, material este con el que se hizo la singular cornisa. Como es norma, consta de dos plantas: la baja, casi ciega, y la principal, en las que se abren tres ventanas –dos al frente y una al lateral-, de arcos escarzanos de ladrillo, de amplia rosca, y alféizar de granito, con una saetera por debajo (2).La portada se abre en el lado derecho de la fachada (3). Es de medio punto y de grandes dovelas de granito, sin imposta, en cuya clave se inserta un pequeño escudo, de caliza, con las armas de Contreras (4).»
Este gran arco da paso al zaguán (5), uno de los mejor conservados de la ciudad. Las paredes ofrecen idéntico tratamiento que la fachada y el pavimento es una acabada muestra, con sus ringleras de granito encuadrando los cantos rodados que forman dibujos (5.1).
Frente a la portada hay una ventana, provista de fuerte reja, cuya función era observar a quien accedía al zaguán. El techo es un sencillo alfarje.
Siguiendo el modo islámico medieval de acceso a la zona residencial, la entrada al patio no está en el eje de la portada del edificio, sino desplazada al fondo del zaguán, con el fin de preservar la intimidad de la familia. Esta sencilla puerta, con arco rebajado y jambas de ladrillo está coronada por un escudo de granito con las armas de la familia Del Río (6), da acceso al patio (7), muy singular en verdad, pues no sigue el tipo de los de una casa señorial. Tiene algo de popular, sobre todo en la doble hilera de canes labrados (7.1) que recorren tres de sus frentes y que sirven de apoyo a una galería de madera, con toscos pies derechos.
Los fustes de granito de los pórticos, ofrecen una curiosa disposición en ángulo, frente a lo que es común en Segovia, en que ocupan tres lados, son los originales. A la izquierda, junto al brocal del pozo (8), la rampa escalonada de bajada a los sótanos (9) con techo de redondas vigas y otro pozo, probablemente destinado a almacenar nieve (10). La fuente, con unos dragoncillos de bronce fue colocada recientemente (11).
Es de destacar en este patio la magnífica carpintería original de una gran ventana protegida por una no menos vistosa reja, también del siglo XV (12).
En el ángulo derecho del patio, tras ascender por cuatro peldaños de granito, una pequeña puerta, da acceso a las dos salas de la planta baja, que conservan los alfarjes originales, policromados y en cuyas tabicas lucen las armas de los señores de la casa, alternándose las de Contreras con las Del Río (13). Al fondo de la primera sala, más amplia, está la ventana de vigilancia del acceso al zaguán, que se mencionó.
De la segunda sala, de techo más bajo e igualmente decorado, arranca la escalera que asciende a la planta noble (14).
En origen había dos estancias a lo largo de la fachada principal: una cuadrada con su ventana, y otra, el gran salón iluminado por tres ventanas que conservan los cortejadores (15), asientos que flanquean el vano. Los suelos son de barro cocido y los techos, unos sencillos alfarjes. Las paredes se decoran con zócalos pintados con trazados geométricos de vivos colores (16), obra moderna que reproduce los antiguos de los que se conservan fragmentos en la que actualmente es la fachada posterior del edificio pero que, en su momento, eran paredes interiores de la casa (16.1).
Otras dos salas más pequeñas, en la crujía de poniente, dan paso a la cocina (17), obra moderna en que se ha reproducido la que pudo haber tenido la casa. De la cocina se sale a la galería de madera (18), en cuyas paredes podemos contemplar unos curiosos grafitos que trazaba la servidumbre (19). La fachada trasera muestra con claridad que el edificio tenía una extensión mayor y que, en un momento impreciso, fue derribada una parte del mismo, dejando a la vista paredes que, en su momento estaban en el interior de la vivienda (20).